«Compre tierra, que ya no hacen más.» – Mark Twain
Invertir en el sector agrario puede ser una decisión estratégica y beneficiosa a largo plazo. A continuación, os presentamos algunas de las principales ventajas de invertir en este sector:
- Inversión segura y estable: La agricultura es un sector alejado de la especulación y la volatilidad, con un crecimiento superior al 1,5% en las últimas dos décadas. Genera más del 14% del empleo nacional y representa el 19% del PIB en Cataluña.
- Bajo riesgo: El sector agrario presenta un riesgo muy bajo para el inversor debido a su estabilidad y crecimiento, siendo considerado estratégico por el gobierno y la UE.
- Peso económico significativo: El sector agroalimentario catalán es esencial para la economía. La combinación de la actividad agraria, la ganadería y el sector alimentario representa una facturación conjunta de 38.205 millones de euros. Esto es siete veces más que los fabricantes de productos farmacéuticos y más del doble que la industria química o el sector de la automoción1.
- Contribución al PIB: El sector agroalimentario genera aproximadamente el 19% del PIB catalán. Además, el mercado internacional ya supone un 60% de las ventas, demostrando su competitividad y potencial de crecimiento2.
- Inversión extranjera: Cataluña es atractiva para la inversión extranjera en este sector. Entre 2017 y 2021, se realizaron 36 proyectos de inversión extranjera, captando 595 millones de euros. Esto representa un crecimiento del 16%3.
- Ayudas y tecnologías: El Departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural ofrece ayudas para la tecnología 4.0 y la agricultura de precisión. Éstos.
- Fácil de amortizar y rentable: Los proyectos de inversión en agricultura ofrecen mejores márgenes de rentabilidad y son más fáciles de amortizar en menos tiempo.
- Moderno e innovador: El campo catalán ha experimentado una profunda transformación, incorporando avances tecnológicos como robots, sensores y software especializado. La inversión privada en I+D del sector agroalimentario aumentó casi un 12% en 2018.
- Amplio abanico de oportunidades: En Cataluña disponemos de múltiples posibilidades de inversión en diferentes productos agrícolas, ganaderos y forestales. La diversidad de cultivos fomenta la innovación y la adopción de nuevas tecnologías agrícolas, mejorando la productividad y la sostenibilidad.
- Ingresos recurrentes y protección ante la inflación: Las nuevas técnicas de gestión agrícola aportan ingresos recurrentes al inversor y diversificación ante inversiones tradicionales.
- Consolidación del sector: Se prevé una fase duradera de consolidación en el sector agrícola catalán, especialmente en el hortofrutícola, aportando capital para su crecimiento y mejora de eficiencia.
- Crecimiento estructural a largo plazo: Impulsado por el aumento de población, mayor poder adquisitivo y demanda de alimentos saludables y sostenibles.
- Necesidad básica: La alimentación es una necesidad fundamental, por lo que la agricultura tiene un gran potencial de crecimiento como sector clave para el desarrollo económico.
- Valor Tangible: Las tierras agrícolas son activos tangibles que ofrecen seguridad y valor intrínseco. A diferencia de otras inversiones financieras, la tierra tiene un valor físico real. Con el tiempo, el valor de las tierras agrícolas tiende a aumentar, ofreciendo apreciación de capital.
En resumen, invertir en el sector agrario en Cataluña puede ser una decisión inteligente, dada su importancia económica y las oportunidades disponibles. 😊🌱🚜